SIEMPRE LISTO PARA REACCIONAR

Una estación de control central es fundamental para lograr un buen control de la situación. La clave está en la combinación de elementos como cámaras, sensores, lectores de control de acceso e incluso drones en un único sistema totalmente integrado y simplificado que, como su nombre indica, puede gestionarse desde una ubicación centralizada. No se trata solo de prestar atención a varias salas, lugares o manzanas de una ciudad, sino que una estación de control central debe ser capaz de analizar los datos situacionales que ha recopilado y movilizar a las personas adecuadas cuando llegue el momento de pasar a la acción.